Existe una marcada tendencia de los consumidores hacia productos amigables con el medio ambiente y la industria del retail se está abriendo a estas opciones que llegan desde el laboratorio al mercado.

Considerando la gran disponibilidad de residuos de la industria forestal en la región, y el apoyo de empresas productoras de plástico, el área Biomateriales de UDT tuvo la iniciativa de desarrollar la versión chilena de madera-plástico, presente en USA, utilizando materias primas y métodos de procesamiento propios. Innovando no sólo en la tecnología sino también en la aplicación final.

“Esta tecnología ofrece amplias posibilidades tanto técnicas como de mercado, entregando nuevos materiales termoplásticos con distintas aplicaciones y de costo competitivo para las empresas transformadoras del plástico versus productos como el polipropileno virgen. Lo anterior, con la finalidad de generar un producto amigable con el medioambiente que tenga un sello ecológico y apariencia natural”, explica Carolina Olivari, Encargada de Plantas Piloto del Área Biomateriales en UDT.

En tanto, Álvaro Maldonado, Jefe de Área Biomateriales UDT, señala que en conjunto con las empresas Comberplast y American Home, se postuló a un programa de Corfo que les permitió empaquetar y transferir la tecnología.

Actualmente estos productos para el hogar -porta cubiertos, secadores de platos y basureros, bandejas- se encuentran disponibles en 20 tiendas Sodimac en Santiago, Valparaíso y recientemente en la tienda del Mall Mirador de Concepción, alcanzando las 30 mil unidades vendidas en todo el país.

“Los sueños no paran, las expectativas futuras son alcanzar un posicionamiento en Sodimac Sudamérica y desarrollar nuevos productos para lanzar al mercado., señaló Carolina Olivari

Desarrollo de la Bioeconomía

El proyecto fue ganador del Concurso Empaquetamiento y Transferencia de I+D de Corfo y permitió el desarrollo de un prototipo tecnológico comercializable con características diferenciadoras, por un monto de cofinanciamiento de casi 100 Millones de pesos por parte de la Estatal, correspondiente al 60 por ciento del costo total.

Gracias a este financiamiento, se optimizó la fabricación de los productos y se evaluó su aceptación en el mercado con los auspiciosos resultados obtenidos. Un resultado que Corfo espera se replique en más proyectos de carácter científico.

“Sin duda existe un problema, y no sólo en Chile, sino en todos los sistemas de innovación, esto es, que nos cuesta transferir las investigaciones científicas al mercado. Es el llamado síndrome del valle de la muerte que este equipo ha sabido superar al entrar al mundo comercial con un producto terminado que no se queda sólo en un excelente paper científico”, indicó Juan Mardones, Director Ejecutivo del Comité de Desarrollo Productivo Biobío.

“En UDT hemos comprobado que es posible llevar la I+D a la vida cotidiana de las personas e innovar a nivel nacional”, señaló Álvaro Maldonado, Jefe de Área Biomateriales UDT.

Fuente: Comité de Desarrollo Productivo Regional Biobío