El Grupo Marina incorporó este mes cuatro centros comerciales al ciclo de recuperación de mascarillas, habilitando contenedores en sus recintos.

Una cifra que supera las 2 millones 400 mil mascarillas, equivalentes a nueve toneladas y media, ha reciclado la Unidad de Desarrollo Tecnológico (UDT) de la UdeC a un año de la puesta en marcha de un proyecto destinado a recuperar el material de uno de los elementos de protección personal más usados a partir del inicio de la pandemia.

Hasta la semana pasada, los números de la UDT contaban la fabricación de unas 7 mil maceteros y dos mil 200 bandejas a partir del pellet generado con las fibras de los cubrebocas que han recibido de un grupo de 80 instituciones públicas y privadas, en su mayoría de la Región del Biobío, que han confiado en la iniciativa.

Este proyecto partió en junio de 2020, como una investigación -con sus primeros ensayos- en el marco del plan de proyectos Covid 19 impulsado por el Ministerio de Ciencia y Corfo, abriéndose a empresa e instituciones en mayo del año pasado.

Pero los buenos resultados no solo se miden en términos numéricos. La subdirectora del Departamento de Consultoría e Innovación UDT, Carla Pérez Quilodrán, dice que esta iniciativa ha permitido visibilizar las actividades de investigación en torno a la economía circular que lleva a cabo el centro universitario situado camino a Coronel.

“Y como trabajamos harto con colegios, el proyecto ha hecho que los niños vayan visualizando que en el reciclaje que no basta con separar en la casa, que hay que ser un poco más cuidadosos en el tema la segregación. Entonces, el ver productos tangibles con los elementos que reciclan les termina haciendo sentido”, acota la investigadora.

También señala que este trabajo contribuye a hacer conciencia sobre una serie de residuos que hoy no se reutilizan, “pero que con un poco de esfuerzo, creatividad e innovación, que es lo que aportamos nosotros, podrían reciclados”.

Por otro lado, cuenta que a partir de este proyecto han observado que en las empresas existe un interés creciente en la economía circular y que también se manifiestan receptivas a la incorporación de material reciclado en sus procesos.

“Todo esto nos tiene súper contentos, porque nos ha permitido relevar el impacto que tiene la ciencia la investigación en resolver problemas comunes”, aseveró la ingeniera.

Este mes, la UDT captó nuevos socios para su proyecto a través del Grupo Marina. De este modo, sus centros comerciales de Viña del Mar, Puente Alto, Curicó y Concepción (Mall del Centro) se incorporaron al ciclo de recuperación, habilitando contenedores en sus recintos.

«El planeta necesita un cambio y todos debemos ser parte de la acción. Buscarle una segunda vida a los cientos de mascarillas que usamos a diario es un aporte para cuidar el lugar donde vivimos», comentó Carla Ratto, gerenta de marketing del holding, en relación al acuerdo que considera la entrega de bandejas para los patios de comida de los malls desde la UDT.

“Ha sido todo un éxito, porque los contendores se llenaron rápidamente. De hecho, ya el viernes vinieron a dejar el primer envío de mascarillas, de unos 60 kilos que equivalen a 12 mil unidades.  Eso es lo que se recolectó en solo tres días en Concepción”, cuenta Pérez.

Otra de las novedades del proyecto es la fabricación de la primera partida de basureros -350 en total- fabricados del material recuperado de las mascarillas y que llegarán durante esta semana.

Carla Pérez explica que, en general, los maceteros -que se pueden adquirir también en las tiendas de souvenir de la UdeC- tienen una mejor recepción entre los socios que entregan sus residuos al proyecto.

“Los piden harto como regalos corporativos, para hacer conciencia social a través de campañas medioambientales o para premios.  Por ejemplo, Softys -empresa en convenio- mandó a hacer maceteros en el verano para entregarlos a Fundación Las Rosas”, indica.

Pérez adelantó que cuando lleguen los basureros se entregarán varios kits a Asipes -que también cuenta con convenio con la UDT- que los distribuirá entre juntas de vecinos y colegios que participan junto a ellos en el proyecto.

Por otro lado, anunció que están a la espera de dos moldes -adquiridos en el marco de un proyecto Corfo que ganaron el año pasado- para la fabricación de un tipo de macetero de mayor tamaño y otros pequeños para suculentas. Estos últimos comenzarían a fabricarse en la UDT en el lapso de dos semanas.

“Además contamos con un convenio con transformadores de plástico con quienes estamos viendo otros productos, que puedan ser fabricados por ellos en base al pellet de mascarillas, que es lo que elaboramos nosotros”, indicó.

Fuente: Noticias UdeC